Para poder responder a esta pregunta debemos partir de la premisa que la Isla de Irlanda tiene en su historia cerca de 800 años de dominio británico, viéndose impuestas unas costumbres, un lenguaje y una forma de funcionamiento característica del Reino Unido, muchas arraigadas tan profundamente que en la actualidad forman parte de la joven República.
En UK e Irlanda, como en la mayoría de las otras ex-colonias del Imperio Británico: India, Sudáfrica, Australia, Nueva Zelanda…!pero no los Estados Unidos! la circulación está organizada con la obligación de mantener el sentido de la marcha en el lado izquierdo, a diferencia del resto de paises Europeos.
Un dato que nos puede sorprender es que en el mundo «solamente» el 66% de las personas están acostumbradas a conducir ¡por la derecha!. El restante 34%, de los cuales los irlandeses forman parte, están acostumbrasdo a tener el volante en el asiento delantero de la parte derecha del vehículo y a tomar las redondas en ¡el sentido contrario!
La historia explica que en el pasado los caballeros solían caminar por el lado izquierdo para poder extraer su espada con la mano derecha más facilmente, en el caso de un ataque inesperado.
También era costumbre en los tiovivos y los torneos de caballos de la Edad Media mantenerse en el lado izquierdo puesto que el peso de la lanza era sustentado como tradición con la mano derecha… ¡eran tiempos duros para los zurdos!
En los siglos sucesivos permaneció esta costumbre y las carrozas respetaron el sentido de la marcha en el lado izquierdo.
Se cuenta que fué el revolucionario francés Maximilien de Robespierre el que comenzó a cambiar las cosas. Durante el periodo de la Revolución Francesa también en oposición al Reino Unido, eterno rival por su presunta alma elitista, demasiado bugués, propuso invertir el sentido de la marcha.
El lado derecho se reservaba como «el lado del pueblo» el cual caminaba a pie, a diferencia del «lado aristócrata» que usaban carrozas por el lado izquierdo.
Por otro lado, se cuenta que también Napoleón Bonaparte, uno de los zurdos más famosos de la historia, acogió con benevolencia esta idea ayudando a difundirla con sus conquistas en todo el Viejo Continente. Obviamente a excepción de Inglaterra, y por consiguiente, de la Isla de Irlanda que por aquel entonces era territorio Británico.
Mar Sierra